Fairwork Argentina Puntuaciones 2022: Nuevo informe sobre la economía de plataformas en América Latina

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Autores: Pía Garavaglia, Julieta Haidar, Marina Benedine, Sabina Giostra, Gina Ballabén, Mark Graham, Alessio Bertolini

En el informe de ‘Fairwork Argentina Puntuaciones 2022’ se examinan las condiciones laborales en seis de las plataformas de delivery y transporte más importantes del país (Uber, Cabify, Rappi, Pedidos Ya, Beat y DiDi) en base a los cinco principios de trabajo justo de Fairwork.

América Latina ha estado en el centro de los recientes debates sobre las condiciones de los trabajadores en la economía de las plataformas y sus oportunidades de mejora. Actualmente, el proyecto Fairwork está presente en seis países latinoamericanos: Argentina, Chile, Colombia, Paraguay, Ecuador y Brasil. Este informe presenta la cuarta serie de calificaciones de Fairwork para la región.

La economía de las plataformas digitales en Argentina se ha ido consolidando desde antes de la pandemia. Con bajas barreras de entrada al mercado laboral, estas plataformas de mano de obra poco calificada han consolidado su papel como una forma práctica y flexible de generar ingresos para los trabajadores más allá de las relaciones laborales tradicionales.

Sin embargo, la pandemia también ha aumentado las vulnerabilidades de los trabajadores de las plataformas y ha puesto de manifiesto las preocupaciones existentes en materia de protección social y sanitaria, precariedad laboral y exposición a riesgos. La naturaleza del trabajo en plataformas también ha cuestionado los derechos de organización y negociación colectiva, lo que se ha abordado parcialmente mediante esfuerzos pioneros para organizar a los trabajadores de plataformas en Argentina. Como resultado, existe un debate en curso sobre las condiciones de trabajo en la economía de plataforma y la necesidad de garantizar políticas adecuadas sobre la regulación del mercado laboral.

El puntaje de las plataformas analizadas en este primer reporte de Fairwork en Argentina ha sido bajo. Esto va en línea con los puntajes obtenidos en otros países de América Latina, lo que demuestra que estas plataformas, si bien crean puestos de trabajo, reproducen las condiciones laborales precarias preexistentes en la región. No obstante, la gran distancia entre los puntajes actuales y los óptimos deja espacio para la implementación de mejores prácticas. Para esto, es fundamental seguir estudiando la economía de las plataformas en Argentina, su dinámica, volumen, impactos, y condiciones laborales de sus trabajadores, de manera tal que las posibles intervenciones sean fructíferas para todas las partes intervinientes en este ecosistema.

Puntuaciones Fairwork Argentina 2022:

Fairowrk puntua a las plataformas digitales en base a 5 principios de ‘trabajo justo’ – pago justo, condiciones justas, contratos justos, gestión justa y representación justa. Para llevar a cabo esta investigación, entre agosto y noviembre de 2021 se realizaron entrevistas en profundidad a trabajadores y gestores de estas plataformas, a los cuales se les solicitó evidencia documental respecto a sus políticas sobre los cinco principios.

Didi es la única plataforma que puntúo algún punto, consiguiendo un punto por condiciones justas al demonstrar que mitiga algunos riesgos laborales y otro punto por contractos justos. También puedo evidenciar que ofrece a sus trabajadores un canal de comunicación claro con la plataforma, obteniendo así el primer punto por gestión justa.

Principales hallazgos

El puntaje de las plataformas analizadas en este primer reporte de Fairwork en Argentina ha sido bajo, ya que ninguna ha obtenido más de 4 puntos, sobre un total de 10. Esto va en línea con los puntajes obtenidos en otros países de América Latina, lo que demuestra que estas plataformas, si bien crean puestos de trabajo, reproducen las condiciones laborales precarias preexistentes en la región. No obstante, la gran distancia entre los puntajes actuales y los óptimos deja espacio para la implementación de mejores prácticas tanto en Argentina como en la región.

Pago justo: Las plataformas no aportaron evidencia suficiente para demostrar que para la jornada horaria ofrecen a los trabajadores al menos el equivalente al salario mínimo después de deducir costos. Cabe aclarar que para dicho cálculo se contemplan todas las horas de conexión o logueo (así se obtengan ingresos o no), como también los costos asociados al trabajo que deben afrontar los propios trabajadores de acuerdo a la actividad. En el caso del delivery: mantenimiento del vehículo, casco y elementos protectorios, combustible, celular y datos, entre otros. En el caso del transporte de pasajeros se agrega a estos costos los que provienen de alquileres de vehículos y cuentas que incrementan considerablemente los gastos a cargo de los conductores. En términos generales, se observa que los trabajadores de reparto tienen una remuneración horaria considerablemente inferior a la de los conductores de pasajeros.

Condiciones justas: Los trabajadores de plataformas enfrentan numerosos riesgos en el desarrollo de su trabajo. En América Latina, y Argentina no es la excepción, a los riesgos derivados por ejemplo de la exposición a los cambios climáticos y los accidentes de tráfico, se agregan otros asociados a la inseguridad y violencia urbana: la exposición a robos y situaciones de violencia, son una denuncia común de los trabajadores. A partir de 2020 a ello se sumó el riesgo de contagio de COVID-19.

Las plataformas estudiadas alegaron ser conscientes de estos riesgos y tomar medidas para mitigarlos. Esto incluye validación de perfiles, monitoreo del trayecto por GPS, provisión de seguros ante accidentes. Sin embargo, sólo Didi facilitó evidencia que sustente y brinde el detalle de dicha cobertura, y que la misma es operativa mientras el conductor esté logueado en la plataforma y no únicamente cuando realiza un trayecto.

Contratos justos: Para otorgar el punto correspondiente a este principio las plataformas deben poder evidenciar que tienen términos y condiciones accesibles y cuyo contenido sea fácilmente legible. Asimismo, se requiere que reconozcan el marco regulatorio de la República Argentina y que cualquier modificación en los mismos sea debidamente notificada. Sólo una de las plataformas (Didi) demostró cumplir dichos requisitos.

El segundo punto hace énfasis tanto en una clara definición de la relación laboral, como en la inexistencia de cláusulas que eximan la responsabilidad de la empresa ante conflictos con los trabajadores. En principio, todas las plataformas definen a los trabajadores como independientes. Sin embargo, en todos los casos se encontraron cláusulas que muestran unilateralidad en los procesos de resolución de conflictos, o bien eximen a la plataforma de responsabilidades por negligencia o condiciones de trabajo inadecuadas.

Gestión justa: Uno de los puntos que más se manifestó en las entrevistas con los trabajadores es la falta de contacto humano directo como vía de comunicación con las plataformas, como también la arbitrariedad en la aplicación de suspensiones o cancelaciones. Sólo Didi proporcionó evidencia que dé cuenta de que funciona un canal claro y accesible todos los conductores. Dicho canal opera recibiendo tanto consultas como apelaciones, y el mismo es accesible incluso en los casos que los conductores hayan sido sancionados. En otros casos estos canales existen, pero no se encuentran disponibles para todos los trabajadores sino que deben cumplir ciertos parámetros (por ejemplo, los que tienen mejores evaluaciones o índices de aceptación de pedidos o trayectos).

Con respecto al segundo umbral de este principio, sólo Didi pudo conseguir dicho punto al haber cumplido con el punto 4.1. Esto fue acompañado de un anuncio sobre el lanzamiento de una función dentro de la aplicación que conecta a conductoras y pasajeras mujeres, con el objetivo de brindar mayor seguridad. Si bien otras plataformas también mostraron tener iniciativas que promueven la equidad, no lograron aportar evidencia suficiente que permita obtener el punto necesario para que sea otorgado el 4.2.

Representación justa: El punto básico de este principio requiere que existan mecanismos documentados para que los trabajadores expresen su voz. Obtener el punto avanzado requiere la existencia de un organismo colectivo de trabajadores reconocido y que puede llevar a cabo un proceso de representación y negociación colectiva.

Varias plataformas argumentaron que tienen sus propios mecanismos de consulta con los trabajadores, como encuestas y reuniones grupales, pero ninguna pudo mostrar que mantiene comunicaciones con referentes o representantes de aquellos, ni reconocen a algún tipo de organización colectiva. Esto hace que los trabajadores de plataformas de Argentina sean excluidos de mecanismos de representación formal que les permitan negociar sus ingresos y condiciones de trabajo. Por el contrario, prima la unilateralidad de las decisiones empresariales. Por todo esto, ninguna plataforma obtuvo un punto en este principio.

La petición de Fairwork:

Como parte de nuestras vías de cambio, hemos introducido la petición de Fairwork. Esta petición busca aprovechar el poder de las políticas de adquisición, inversión y asociación de organizaciones y empresas para promover un trabajo de plataformas más justo.

Organizaciones como universidades, empresas y ONGs tienen el poder para promover el trabajo justo en esta economía y apoyar a las plataformas y aplicaciones que ofrecen mejores condiciones de trabajo, guiándose por los principios y puntuaciones de Fairwork.

Las organizaciones que firman nuestra petición podrán mostrar la insignia de “Socio Fairwork” en su sitio web y materiales promocionales.

La petición de Fairwork propone dos niveles de compromiso: simpatizante o socio. Los simpatizantes oficiales se comprometen a apoyar públicamente la mejora del trabajo en plataformas y a poner los recursos de Fairwork a disposición de sus equipos para ayudarles a tomar decisiones informadas y socialmente responsables cuando utilicen o se relacionen con plataformas de trabajo digital. Los socios de Fairwork se comprometen a implementar cambios concretos y significativos en sus políticas internas guiadas por los principios y puntuaciones de Fairwork, por ejemplo comprometiendose a solo usar plataformas con buenas condiciones laborales, siempre que sea posible.